Redacción
(Mayo 03 de 2024)
Las utilidades son las ganancias obtenidas por una empresa después de deducir todos los gastos, impuestos y reservas necesarias. Estas ganancias se distribuyen entre los accionistas, pero también se reserva un porcentaje para los trabajadores, de acuerdo con lo establecido en la LFT.
Según la ley mexicana, todos los trabajadores tienen derecho a recibir una parte de las utilidades de la empresa en la que laboran, siempre y cuando cumplan con ciertos requisitos. Estos requisitos incluyen haber laborado al menos 60 días en el año fiscal correspondiente y no haber sido despedido por causa justificada antes del reparto de utilidades. El Manual Laboral y Fiscal sobre la Participación de los Trabajadores en las Utilidades de las Empresas 2023 proporciona una detallada explicación acerca del propósito esencial de esta prestación. En su esencia, la participación de los trabajadores en las utilidades de las empresas tiene como objetivo fundamental establecer un equilibrio justo y equitativo en la relación entre el trabajo y el capital.
Reconoce de manera significativa y tangible la valiosa contribución que la fuerza laboral realiza al funcionamiento y éxito de una empresa. Además, aspira a mejorar la distribución de la riqueza generada, asegurando que los beneficios económicos obtenidos por la empresa no se concentren únicamente en los accionistas o propietarios, sino que también se compartan de manera justa con aquellos que contribuyen con su trabajo diario al crecimiento y desarrollo de la misma. ¿Cómo se deben pagar las utilidades? La Ley Federal del Trabajo (LFT) establece que el proceso de distribución de las Participaciones de los Trabajadores en las Utilidades (PTU) inicia con la evaluación de las ganancias generadas por la empresa o el empleador durante el año fiscal respectivo. En el caso del ejercicio fiscal de 2024, las utilidades se calcularán tomando como referencia los ingresos obtenidos durante el año anterior, es decir, el período fiscal de 2023. Deben distribuir las utilidades a los trabajadores entre el 1 de abril y el 30 de mayo, mientras que para las personas físicas hay un periodo que va del 1 de mayo al 29 de junio. El reparto de utilidades sigue un proceso específico: inicialmente, el 10% de las ganancias se distribuye de manera equitativa entre todos los trabajadores, sin importar sus ingresos individuales. Luego, la segunda parte del 10% de las utilidades se asigna según el salario de cada empleado, considerando la cantidad percibida diariamente en efectivo.